por favor m pueden dar un poema corto de caballos gracias
Hola!!
a mi me gusta estos lo que pasa es que son un poco larguillos xD a ver si te gustan ;)
http://www.poemas-del-alma.com/luis-de-gongora-ent...
Este es mas corto y muy lindo =) a mi me gusta muchissimo.
Qué hace un caballo blanco, galopando
en el cielo
un día sin aire electrizado, sin embudos
de tornados y sin magos.
Qué hace en un potrero sin empalizada
como si fuera libre y feliz en el aire
haciendo flamear la cola como una banderola.
De dónde viene su galope, a donde se dirige
qué quiere.
Y no es el caballo del Apocalipsis, se parece
mas bien al de un cuadro
del Siglo XIII
que galopa en una misa encima de unos feligreses.
Qué extraño un caballo blanco, galopando
en el cielo, sacudiendo
las crines y espantando a las nubes
como en una pradera inmensa
sin árboles ni vados ni hondonadas glaucas
con solo el viento en las patas
que brillan cuando brinca.
saludos
^^
Mi caballo
Ricardo Güiraldes
Es un flete criollo, violento y amontonado.
Vive para el llano.
Sus vasos son ebrios de verde y la tarde
en crepúsculo orificado
se enamoró de sus ojos.
Comió pampa, en gramilla y trébol
y su hocico resopla vastos galopes en sed de horizonte,
la lÃnea, la eterna lÃnea, allá en que se acuesta el cielo.
Contra el amanever, cuando la noche olvida sus estrellas.
golpeóse el pecho de oro y, en laterde, enancó chapas de luz.
Iluso, la tierra rodó al empuje de sus cascos;
fue ritmador del mundo.
Realidad? Qué importa si vivió de inalcanzable!...
En la tarde
R.G.
En la tarde, que tan bien piensa, al pausado
tranco de mi caballo, conocÃa ya ese deambular
al través de sà mismo en una forma
pura en su frente y aguda en su capacidad
de percibir y comprender conjuntamente.
caballo caballito
tu eres un bonito animalito
dijame montar que es mi passion
tanto como lo es mi don
estas hecho para montar
pero tienes derecho a ser cuidado
no todos lo van a aceptar
pero tienes que estar bien lavado
aigual que yo tu tienes amigos
tienes derecho a sociedad
humanos y cavallitos
de tu misma edad
Conozco una canción de Marisela verana del álbum (Naci En El Caribe) y se llama mi paso fino dice algo como:
La madre naturaleza a dios se le lamentaba
pues creÃa que faltaba en el mundo más belleza
y el señor con su grandeza soplo un fuerte torbellino
oro de sol matutino mesclo con truenos y rallos
y formo un bello caballo y lo nombro paso finoooo
sintió el todo poderoso laser con su creación
perfecta conformación de animal noble y hermoso
creció valiente y fogoso que linaje tan genuino
le otorgo en poder divino que para siempre tendrÃa
supre más soberanÃa el soberbio paso fino
Eso fue una pequeña muestra de esta bella canción.
Innecesario, viéndome en los espejos
con un gusto a semanas, a biógrafos, a papeles,
arranco de mi corazón al capitán del infierno,
establezco cláusulas indefinidamente tristes.
Vago de un punto a otro, absorbo ilusiones,
converso con los sastres en sus nidos:
ellos, a menudo, con voz fatal y frÃa
cantan y hacen huir los maleficios.
Hay un paÃs extenso en el cielo
con las supersticiosas alfombras del arco iris
y con vegetaciones vesperales:
hacia allà me dirijo, no sin cierta fatiga,
pisando una tierra removida de sepulcros un tanto frescos,
yo sueño entre esas plantas de legumbre confusa.
Paso entre documentos disfrutados, entre orÃgenes,
vestido como un ser original y abatido:
amo la miel gastada del respeto,
el dulce catecismo entre cuyas hojas
duermen violetas envejecidas, desvanecidas,
y las escobas, conmovedoras de auxilios,
en su apariencia hay, sin duda, pesadumbre y certeza.
Yo destruyo la rosa que silba y la ansiedad raptora:
yo rompo extremos queridos: y aún más,
aguardo el tiempo uniforme, sin medidas:
un sabor que tengo en el alma me deprime.
Qué dÃa ha sobrevenido! Qué espesa luz de leche,
compacta, digital, me favorece!
He oÃdo relinchar su rojo caballo
desnudo, sin herraduras y radiante.
Atravieso con él sobre las iglesias,
galopo los cuarteles desiertos de soldados
y un ejército impuro me persigue.
Sus ojos de eucaliptos roban sombra,
su cuerpo de campana galopa y golpea.
Yo necesito un relámpago de fulgor persistente,
un deudo festival que asuma mis herencias......
Tengo el caballo a la puerta
Tengo el caballo a la puerta,
¿te quieres venir conmigo?.
Yo no te obligo.
Sólo te brindo ocasión
de darte en mi soledad
una casa, un corazón
y un cariño de verdad.
¿Qué no quieres...? Allá penas.
Mientras yo tenga en mis venas
sangre de piropo y ronda;
mientras, por mas que se esconda,
no haya mujer que resista
este pase de conquista
de los vuelos de mi capa;
mientras la flor que se tapa
con clavel y celosÃa
se asome a verme pasar
pensando en la VicarÃa;
y mientras de par en par
se abran a mi reclamo
el corazón donde llamo
y la boca donde toco...
a mi se me importa poco
que quieras o que no quieras
ser dueña de mi fortuna.
Hay mucha espiga en las eras
para pensar sólo en una
Y mira lo que te digo:
un dÃa deje la luna
porque no quiso venir
conmigo.
Y no me costó ninguna
fatiga romper cadenas.
Con esto quiero decir
que a ti, que no eres la luna,
me costará menos pena
dejarte, si lo prefieres.
Me sobran a mà mujeres.
De modo que tú dirás;
si me das el sÃ, tendrás
beso blando, brazo fuerte,
casa, cariño y corona
y, si es preciso, mi muerte
por defender tu persona.
¿Qué no quieres...?
No hay que hablar
de olvidos ni sufrimientos:
que tengo yo muchos vientos
por donde poder volar.
Y me iré calle adelante,
sin fatiga y sin desplante,
con una copla de mayo
saltando en el corazón
mientras me acompaña el son
el paso de mi caballo:
-Voy a la esquina a cambiar
por una rosa otra rosa,
y a ver quien lo va a notar;
que si una rosa es hermosa...
la otra... no se queda atrás
En fin; no quiero hablar más
de lo que ya no precisa
más explicación.
Mi corazón va deprisa
y no le gusta perder
tiempo en la conversación,
mientras se pueda entender
a besos por los balcones,
Y, torero sin fracaso,
pueda torear al paso
cinturas y corazones.
Ya lo sabes; junto al rÃo
tengo un huerto de limones
Y un arroyito de frÃo
que va sembrando canciones.
Y en la loma
tengo un blanco caserÃo
como una blanca paloma
que se asoma
para beber en el rÃo
Y entre arrayán y romero
un beso sin estrenar
que está diciendo “me muero”
porque no puede aguardar.
Y creciendo junto a una
rosita sin jardinero
tengo la flor de un “te quiero”
para tu pelo de luna
Todo esto, junto al rÃo,
en mi cabaña desierta
Piénsalo bien, amor mÃo...
Tengo el caballo a la puerta.
MANUEL BENÃTEZ CARRASCO
hola! aca encontre algunos
http://www.poemas-del-alma.com/pablo-neruda-caball...
http://frasesparamsn.blogspot.com/2008/03/tengo-el...
Espero te sirva xaoo!!!
Qué hace un caballo blanco, galopando
un dÃa sin aire electrizado, sin embudos
Qué hace en un potrero sin empalizada
De dónde viene su galope, a donde se dirige
qué quiere.
Qué extraño un caballo blanco, galopando
sin árboles ni vados ni hondonadas glaucas
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Hola!!
a mi me gusta estos lo que pasa es que son un poco larguillos xD a ver si te gustan ;)
http://www.poemas-del-alma.com/luis-de-gongora-ent...
Este es mas corto y muy lindo =) a mi me gusta muchissimo.
Qué hace un caballo blanco, galopando
en el cielo
un día sin aire electrizado, sin embudos
de tornados y sin magos.
Qué hace en un potrero sin empalizada
como si fuera libre y feliz en el aire
haciendo flamear la cola como una banderola.
De dónde viene su galope, a donde se dirige
qué quiere.
Y no es el caballo del Apocalipsis, se parece
mas bien al de un cuadro
del Siglo XIII
que galopa en una misa encima de unos feligreses.
Qué extraño un caballo blanco, galopando
en el cielo, sacudiendo
las crines y espantando a las nubes
como en una pradera inmensa
sin árboles ni vados ni hondonadas glaucas
con solo el viento en las patas
que brillan cuando brinca.
saludos
^^
Mi caballo
Ricardo Güiraldes
Es un flete criollo, violento y amontonado.
Vive para el llano.
Sus vasos son ebrios de verde y la tarde
en crepúsculo orificado
se enamoró de sus ojos.
Comió pampa, en gramilla y trébol
y su hocico resopla vastos galopes en sed de horizonte,
la lÃnea, la eterna lÃnea, allá en que se acuesta el cielo.
Contra el amanever, cuando la noche olvida sus estrellas.
golpeóse el pecho de oro y, en laterde, enancó chapas de luz.
Iluso, la tierra rodó al empuje de sus cascos;
fue ritmador del mundo.
Realidad? Qué importa si vivió de inalcanzable!...
En la tarde
R.G.
En la tarde, que tan bien piensa, al pausado
tranco de mi caballo, conocÃa ya ese deambular
al través de sà mismo en una forma
pura en su frente y aguda en su capacidad
de percibir y comprender conjuntamente.
caballo caballito
tu eres un bonito animalito
dijame montar que es mi passion
tanto como lo es mi don
estas hecho para montar
pero tienes derecho a ser cuidado
no todos lo van a aceptar
pero tienes que estar bien lavado
aigual que yo tu tienes amigos
tienes derecho a sociedad
humanos y cavallitos
de tu misma edad
Conozco una canción de Marisela verana del álbum (Naci En El Caribe) y se llama mi paso fino dice algo como:
La madre naturaleza a dios se le lamentaba
pues creÃa que faltaba en el mundo más belleza
y el señor con su grandeza soplo un fuerte torbellino
oro de sol matutino mesclo con truenos y rallos
y formo un bello caballo y lo nombro paso finoooo
sintió el todo poderoso laser con su creación
perfecta conformación de animal noble y hermoso
creció valiente y fogoso que linaje tan genuino
le otorgo en poder divino que para siempre tendrÃa
supre más soberanÃa el soberbio paso fino
Eso fue una pequeña muestra de esta bella canción.
Innecesario, viéndome en los espejos
con un gusto a semanas, a biógrafos, a papeles,
arranco de mi corazón al capitán del infierno,
establezco cláusulas indefinidamente tristes.
Vago de un punto a otro, absorbo ilusiones,
converso con los sastres en sus nidos:
ellos, a menudo, con voz fatal y frÃa
cantan y hacen huir los maleficios.
Hay un paÃs extenso en el cielo
con las supersticiosas alfombras del arco iris
y con vegetaciones vesperales:
hacia allà me dirijo, no sin cierta fatiga,
pisando una tierra removida de sepulcros un tanto frescos,
yo sueño entre esas plantas de legumbre confusa.
Paso entre documentos disfrutados, entre orÃgenes,
vestido como un ser original y abatido:
amo la miel gastada del respeto,
el dulce catecismo entre cuyas hojas
duermen violetas envejecidas, desvanecidas,
y las escobas, conmovedoras de auxilios,
en su apariencia hay, sin duda, pesadumbre y certeza.
Yo destruyo la rosa que silba y la ansiedad raptora:
yo rompo extremos queridos: y aún más,
aguardo el tiempo uniforme, sin medidas:
un sabor que tengo en el alma me deprime.
Qué dÃa ha sobrevenido! Qué espesa luz de leche,
compacta, digital, me favorece!
He oÃdo relinchar su rojo caballo
desnudo, sin herraduras y radiante.
Atravieso con él sobre las iglesias,
galopo los cuarteles desiertos de soldados
y un ejército impuro me persigue.
Sus ojos de eucaliptos roban sombra,
su cuerpo de campana galopa y golpea.
Yo necesito un relámpago de fulgor persistente,
un deudo festival que asuma mis herencias......
Tengo el caballo a la puerta
Tengo el caballo a la puerta,
¿te quieres venir conmigo?.
Yo no te obligo.
Sólo te brindo ocasión
de darte en mi soledad
una casa, un corazón
y un cariño de verdad.
¿Qué no quieres...? Allá penas.
Mientras yo tenga en mis venas
sangre de piropo y ronda;
mientras, por mas que se esconda,
no haya mujer que resista
este pase de conquista
de los vuelos de mi capa;
mientras la flor que se tapa
con clavel y celosÃa
se asome a verme pasar
pensando en la VicarÃa;
y mientras de par en par
se abran a mi reclamo
el corazón donde llamo
y la boca donde toco...
a mi se me importa poco
que quieras o que no quieras
ser dueña de mi fortuna.
Hay mucha espiga en las eras
para pensar sólo en una
Y mira lo que te digo:
un dÃa deje la luna
porque no quiso venir
conmigo.
Y no me costó ninguna
fatiga romper cadenas.
Con esto quiero decir
que a ti, que no eres la luna,
me costará menos pena
dejarte, si lo prefieres.
Me sobran a mà mujeres.
De modo que tú dirás;
si me das el sÃ, tendrás
beso blando, brazo fuerte,
casa, cariño y corona
y, si es preciso, mi muerte
por defender tu persona.
¿Qué no quieres...?
No hay que hablar
de olvidos ni sufrimientos:
que tengo yo muchos vientos
por donde poder volar.
Y me iré calle adelante,
sin fatiga y sin desplante,
con una copla de mayo
saltando en el corazón
mientras me acompaña el son
el paso de mi caballo:
-Voy a la esquina a cambiar
por una rosa otra rosa,
y a ver quien lo va a notar;
que si una rosa es hermosa...
la otra... no se queda atrás
En fin; no quiero hablar más
de lo que ya no precisa
más explicación.
Mi corazón va deprisa
y no le gusta perder
tiempo en la conversación,
mientras se pueda entender
a besos por los balcones,
Y, torero sin fracaso,
pueda torear al paso
cinturas y corazones.
Ya lo sabes; junto al rÃo
tengo un huerto de limones
Y un arroyito de frÃo
que va sembrando canciones.
Y en la loma
tengo un blanco caserÃo
como una blanca paloma
que se asoma
para beber en el rÃo
Y entre arrayán y romero
un beso sin estrenar
que está diciendo “me muero”
porque no puede aguardar.
Y creciendo junto a una
rosita sin jardinero
tengo la flor de un “te quiero”
para tu pelo de luna
Todo esto, junto al rÃo,
en mi cabaña desierta
Piénsalo bien, amor mÃo...
Tengo el caballo a la puerta.
MANUEL BENÃTEZ CARRASCO
hola! aca encontre algunos
http://www.poemas-del-alma.com/pablo-neruda-caball...
http://frasesparamsn.blogspot.com/2008/03/tengo-el...
http://www.poemas-del-alma.com/luis-de-gongora-ent...
Espero te sirva xaoo!!!
Hola!!
a mi me gusta estos lo que pasa es que son un poco larguillos xD a ver si te gustan ;)
http://www.poemas-del-alma.com/luis-de-gongora-ent...
Este es mas corto y muy lindo =) a mi me gusta muchissimo.
Qué hace un caballo blanco, galopando
en el cielo
un dÃa sin aire electrizado, sin embudos
de tornados y sin magos.
Qué hace en un potrero sin empalizada
como si fuera libre y feliz en el aire
haciendo flamear la cola como una banderola.
De dónde viene su galope, a donde se dirige
qué quiere.
Y no es el caballo del Apocalipsis, se parece
mas bien al de un cuadro
del Siglo XIII
que galopa en una misa encima de unos feligreses.
Qué extraño un caballo blanco, galopando
en el cielo, sacudiendo
las crines y espantando a las nubes
como en una pradera inmensa
sin árboles ni vados ni hondonadas glaucas
con solo el viento en las patas
que brillan cuando brinca.
saludos