El estornudo es un mecanismo de defensa de nuestro organismo El estornudo es un síntoma que acompaña fundamentalmente a resfriados, gripes y alergias. Es un acto reflejo e involuntario en el que intervienen los músculos respiratorios de la cavidad torácica, y consiste en una expulsión incontrolada de aire por las fosas nasales y la boca a una velocidad que incluso llega a superar los 150 km/h.
Cuando estornudamos, expulsamos el aire de la cavidad torácica de forma incontrolada por la nariz y la boca, al tiempo que cerramos los ojos e inclinamos hacia delante la cabeza y el tórax, por lo que un simple estornudo puede ser el desencadenante de un accidente de tráfico.
Una sencilla regla puede servirnos para ejemplificar esta afirmación.n estornudo puede hacer que, si circulamos
a 90 km/h, recorramos 25 metros sin control visual, al cerrar los ojos durante un segundo. A partir de aquí, cada uno puede hacer sus cuentas para saber cuántos metros circulará con los ojos cerrados, según la velocidad a la que conduzca su vehículo. Ante una serie repetida de estornudos -lo que es bastante frecuente- lo más conveniente es reducir la velocidad e incluso parar el vehículo con la debida señalización y en el lugar oportuno. En épocas del año en que son frecuentes los resfriados y la gripe, y también a causa de las diferentes alergias, el estornudo siempre resulta incómodo, imprevisible y, sobre todo, muy difícil de controlar y, por ello, peligroso.
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El estornudo es un mecanismo de defensa de nuestro organismo El estornudo es un síntoma que acompaña fundamentalmente a resfriados, gripes y alergias. Es un acto reflejo e involuntario en el que intervienen los músculos respiratorios de la cavidad torácica, y consiste en una expulsión incontrolada de aire por las fosas nasales y la boca a una velocidad que incluso llega a superar los 150 km/h.
Cuando estornudamos, expulsamos el aire de la cavidad torácica de forma incontrolada por la nariz y la boca, al tiempo que cerramos los ojos e inclinamos hacia delante la cabeza y el tórax, por lo que un simple estornudo puede ser el desencadenante de un accidente de tráfico.
Una sencilla regla puede servirnos para ejemplificar esta afirmación.n estornudo puede hacer que, si circulamos
a 90 km/h, recorramos 25 metros sin control visual, al cerrar los ojos durante un segundo. A partir de aquí, cada uno puede hacer sus cuentas para saber cuántos metros circulará con los ojos cerrados, según la velocidad a la que conduzca su vehículo. Ante una serie repetida de estornudos -lo que es bastante frecuente- lo más conveniente es reducir la velocidad e incluso parar el vehículo con la debida señalización y en el lugar oportuno. En épocas del año en que son frecuentes los resfriados y la gripe, y también a causa de las diferentes alergias, el estornudo siempre resulta incómodo, imprevisible y, sobre todo, muy difícil de controlar y, por ello, peligroso.
para que no se nos salgan los ojos
es por el reflejo, obviamente el esfuerzo nos hace reaccionar así.
saludos.
lalo.