Esta novela autobiográfica escrita por José Vasconcelos es considerada una de las obras en prosa más importantes del siglo X X. Fue escrita durante su exilio en 1929. El nombre de “Ulises Criollo” es una referencia al protagonista de “La Odisea”, con el cual el mismo Vasconcelos se compara por el tema del exilio de su patria.
Es el relato de dos historias acerca de una misma persona. Por una parte se encuentra la biografía de José Vasconcelos, recuerdos antiguos que conservaba el autor; las experiencias de su infancia en Sasabe, un pueblo muy pequeño en el desierto de Sonora, punto fronterizo con los Estados Unidos, donde se desarrolla gran parte de ella; al hablar de su adolescencia se remite a Campeche y más tarde a su vida en la Ciudad de México. Narra el gran amor que tenía por su madre, sus hermanos y su padre, por el núcleo familiar y el amor también por otras mujeres, siendo ésta la parte que ocupa mayor volumen en el libro.
Paralelo a su biografía sentimental, Vasconcelos conduce al lector por aspectos que se conocían poco hasta ese momento, acerca de la Revolución Mexicana y el movimiento maderista a través de su biografía como actor político. Fue en la Ciudad de México donde José Vasconcelos inicia su actividad revolucionaria, pues es en ésta donde Manuel Urquidi le presenta a Francisco I. Madero, quien le propone unirse a su plan revolucionario. En este movimiento, Vasconcelos fue el encargado de dar forma al lema maderista: “Sufragio efectivo, no Reelección”, el cual reemplazaba al porfirista “Sufragio Libre”.
“Ulises Criollo”, además de ser una novela que relata la Revolución Mexicana, es también una novela que critica al movimiento y a sus figuras principales. Vasconcelos en esta obra no se retrae de definir a Francisco Villa y a Pascual Orozco como simples asesinos, toscos e ignorantes. Esta concepción de ambos personajes refleja la postura de Vasconcelos ante el movimiento armado del periodo revolucionario, pues no estaba de acuerdo con lograr justicia a través de métodos radicales; para él, la alternativa era la democratización de la sociedad y el respeto a la propiedad privada, postura muy contraria a la del movimiento, pues en él se consideraba y se defendía lo comunitario de la tierra, que la tierra debía ser para todos y que la única forma de llegar a esa sociedad equitativa era mediante la movilización armada.
La firma de los Tratados de Ciudad Juárez, según Vasconcelos, marca la claudicación o decadencia de la Revolución Mexicana, pues se planteó la suspensión del levantamiento armado, que en el Plan de San Luis había propuesto Francisco I. Madero, lo cual representaba un cierto reconocimiento por el gobierno de Porfirio Díaz.
El libro culmina con la preparación de José Vasconcelos para su candidatura presidencial en 1929, veinte años después de que Madero quedó al mando del país. Los resultados de esta contienda fueron muy diferentes a los de 1909, pues Vasconcelos obtuvo únicamente el 1 por ciento de la votación total, quedando muy por debajo de su contrincante Pascual Ortiz Rubio, quien obtuvo el 99 por ciento de los votos.
Answers & Comments
Verified answer
Esta novela autobiográfica escrita por José Vasconcelos es considerada una de las obras en prosa más importantes del siglo X X. Fue escrita durante su exilio en 1929. El nombre de “Ulises Criollo” es una referencia al protagonista de “La Odisea”, con el cual el mismo Vasconcelos se compara por el tema del exilio de su patria.
Es el relato de dos historias acerca de una misma persona. Por una parte se encuentra la biografía de José Vasconcelos, recuerdos antiguos que conservaba el autor; las experiencias de su infancia en Sasabe, un pueblo muy pequeño en el desierto de Sonora, punto fronterizo con los Estados Unidos, donde se desarrolla gran parte de ella; al hablar de su adolescencia se remite a Campeche y más tarde a su vida en la Ciudad de México. Narra el gran amor que tenía por su madre, sus hermanos y su padre, por el núcleo familiar y el amor también por otras mujeres, siendo ésta la parte que ocupa mayor volumen en el libro.
Paralelo a su biografía sentimental, Vasconcelos conduce al lector por aspectos que se conocían poco hasta ese momento, acerca de la Revolución Mexicana y el movimiento maderista a través de su biografía como actor político. Fue en la Ciudad de México donde José Vasconcelos inicia su actividad revolucionaria, pues es en ésta donde Manuel Urquidi le presenta a Francisco I. Madero, quien le propone unirse a su plan revolucionario. En este movimiento, Vasconcelos fue el encargado de dar forma al lema maderista: “Sufragio efectivo, no Reelección”, el cual reemplazaba al porfirista “Sufragio Libre”.
“Ulises Criollo”, además de ser una novela que relata la Revolución Mexicana, es también una novela que critica al movimiento y a sus figuras principales. Vasconcelos en esta obra no se retrae de definir a Francisco Villa y a Pascual Orozco como simples asesinos, toscos e ignorantes. Esta concepción de ambos personajes refleja la postura de Vasconcelos ante el movimiento armado del periodo revolucionario, pues no estaba de acuerdo con lograr justicia a través de métodos radicales; para él, la alternativa era la democratización de la sociedad y el respeto a la propiedad privada, postura muy contraria a la del movimiento, pues en él se consideraba y se defendía lo comunitario de la tierra, que la tierra debía ser para todos y que la única forma de llegar a esa sociedad equitativa era mediante la movilización armada.
La firma de los Tratados de Ciudad Juárez, según Vasconcelos, marca la claudicación o decadencia de la Revolución Mexicana, pues se planteó la suspensión del levantamiento armado, que en el Plan de San Luis había propuesto Francisco I. Madero, lo cual representaba un cierto reconocimiento por el gobierno de Porfirio Díaz.
El libro culmina con la preparación de José Vasconcelos para su candidatura presidencial en 1929, veinte años después de que Madero quedó al mando del país. Los resultados de esta contienda fueron muy diferentes a los de 1909, pues Vasconcelos obtuvo únicamente el 1 por ciento de la votación total, quedando muy por debajo de su contrincante Pascual Ortiz Rubio, quien obtuvo el 99 por ciento de los votos.