Reto, con el mayor de los respetos, a todos los que me pusieron votos negativos a un debate en audio en vivo por skype o escrito por gabito grupos a que demuestren en qué estoy equivocado. De modo contrario, sería una muestra total de cobardía y una falta de intelectualidad al no tener un argumento válido. Que todo sea por la búsqueda de la verdad y la edificación de la iglesia. Me envian entonces un correo por yahoo o a [email protected] haber quien tiene la razón
Es un sacramental instituido por la Iglesia en el numeral 1668 del Catecismo, como símbolo de recuerdo de la cruz en la que Jesús murió por nuestra salvación y signo de redención y de bendición.
Se persigna al inicio de la Santa Misa y al final con la bendición del celebrante. También en el inicio de oraciones.
No dice textualmente “persignar” en la Biblia, pero se deduce y se hace en recuerdo de lo dicho por Jesús en:
Mateo 24, 30 Entonces aparecerá en el cielo la señal (CRUZ) del Hijo del hombre. Todas las razas de la tierra se golpearán el pecho y verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo, lleno de poder y de gloria.
“Con este signo (cruz) vencerás” dijo el Ángel del Señor a Constantino
Y también antes de hacer algo, como un signo para incrementar la autoestima y tener éxito en el objetivo.
(Haciendo una cruz la primera en la frente, para librarnos de los malos pensamientos y diciendo)
+Por la señal de la Santa Cruz,
(otra cruz en la boca, para librarnos de las malas palabras y diciendo)
+de nuestros enemigos
(otra cruz en el pecho, para librarnos de las malas obras y diciendo)
+líbranos Señor Dios nuestro
(y santiguarse diciendo)
+En el nombre del Padre (en la frente) y del Hijo (en el vientre) y del Espíritu (en el hombro izquierdo) Santo (en el hombro derecho). Amén.
Algunas personas nos santiguamos al pasar frente a una Iglesia Católica como un saludo de respeto a Dios y también antes de hacer algo, como un signo para incrementar la autoestima y tener éxito en el objetivo.
Está en el mismo capítulo y versículo donde dice que la Palabra de Dios es sólo y nada más que lo que está escrito en la Biblia....justo al lado también donde dice que hay que hay que creer sólo y nada más que lo que dice la Biblia escrita....
Las bendiciones sobre cosas y personas se suelen expresar con la señal de la cruz. Cuando el sacerdote bendice al pueblo o a algún objeto hace la señal de la cruz, una vez, con su mano derecha, sobre la persona u objeto a bendecir.
Porque no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el Evangelio. Y no con palabras sabias, para no desvirtuar la cruz de Cristo. Pues la predicación de la cruz es una necedad para los que se pierden; mas para los que se salvan -para nosotros- es fuerza de Dios. Porque dice la Escritura: Destruiré la sabiduría de los sabios, e inutilizaré la inteligencia de los inteligentes. ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde el docto? ¿Dónde el sofista de este mundo? ¿Acaso no ha convertido Dios en necedad la sabiduría del mundo? De hecho, como el mundo mediante su propia sabiduría no conoció a Dios en su divina sabiduría, quiso Dios salvar a los creyentes mediante la necedad de la predicación. Así, mientras los judíos piden señales y los griegos buscan sabiduría, nosotros predicamos a un Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad para los gentiles; mas para los llamados, lo mismo judíos que griegos, un Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios. Porque la necedad divina es más sabia que la sabiduría de los hombres, y la debilidad divina, más fuerte que la fuerza de los hombres (I Corintios 1, 17-25).
Es lógico comenzar esta serie de doce cartas sobre la oración cristiana de la misma forma con la que iniciamos toda oración: con la señal de la cruz. Comenzamos a rezar “en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén”. Invocamos a la Santísima Trinidad e iniciamos nuestra oración en su nombre. Recordamos así el centro de nuestra fe recibida en el Bautismo (Mateo 28, 19). Al hacer un ofrecimiento de obras al inicio del día para dar un sentido sobrenatural a todas nuestras actividades; al empezar un examen de conciencia que, más que simple contabilidad moral, es un acto de diálogo con Dios, Padre de misericordia; en el inicio del rezo del Angelus; en las primeras palabras de la Misa: siempre está presente la señal de la cruz y la invocación a Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, de quien procede toda bondad y a cuyo santo nombre nos confiamos.
Rezamos en nombre de Dios y este “nombre” encierra en sí toda la misteriosa realidad de “Aquel que es el que es” (Éxodo 3, 13-15) y no necesita de nada ni nadie. El Catecismo de la Iglesia Católica explica muy bien la profundidad que encierra el nombre de Dios: A su pueblo Israel, Dios se reveló dándole a conocer su Nombre. El nombre expresa la esencia, la identidad de la persona y el sentido de su vida. Dios tiene un nombre. No es una fuerza anónima. Comunicar su nombre es darse a conocer a los otros. Es, en cierta manera, comunicarse a sí mismo haciéndose accesible, capaz de ser más íntimamente conocido y de ser invocado personalmente... Al revelar su nombre misterioso de YHWH, "Yo soy el que es" o "Yo soy el que soy" o también "Yo soy el que Yo soy", Dios dice quién es y con qué nombre se le debe llamar. Este Nombre Divino es misterioso como Dios es Misterio. Es, a la vez, un Nombre revelado y como la resistencia a tomar un nombre propio, y por esto mismo expresa mejor a Dios como lo que Él es, infinitamente por encima de todo lo que podemos comprender o decir: es el "Dios escondido" (Isaías 45, 15), su nombre es inefable (Cf Jueces 13, 18), y es el Dios que se acerca a los hombres. Al revelar su nombre, Dios revela, al mismo tiempo, su fidelidad que es de siempre y para siempre, valedera para el pasado ("Yo soy el Dios de tus padres", Éxodo 3, 6) como para el porvenir ("Yo estaré contigo", Éxodo 3, 12). Dios, que revela su nombre como "Yo soy", se revela como el Dios que está siempre allí, presente junto a su pueblo para salvarlo (Catecismo de la Iglesia Católica 203 y 206-207).
Bueno no toda lo contiene la biblia por el nombre, que le dan las religiones cristianas a sus signos, símbolos y ritos, los cuales son las formas de expresar la fe ante Dios y los mismos hombres; El santiguarse es propio del catolicismo y es la aplicación de los nombres de la santísima trinidad en forma de cruz, en la cual murió nuestro Señor. Es lo mismo que los términos Biblia y Trinidad. Hay que tener cuidado con caer en el biblicismo. Dios te bendiga.
No, como tampoco viene que uses computadoras, ni tampoco viene América para que ahí vivas.
Ve entonces a ordeñar una cabra en Arabia, que eso sí que viene, y deja de contaminarte con cacharros mundanos como este ordenador. Vende lo que tienes y dalo a los pobres.
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No. Lo de persignarse o santiguarse es invento de la iglesia católica, la Gran Ramera de Apocalipsis, y todo en ella es confusión y engaño.
http://www.las21tesisdetito.com/granramera.htm
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Reto, con el mayor de los respetos, a todos los que me pusieron votos negativos a un debate en audio en vivo por skype o escrito por gabito grupos a que demuestren en qué estoy equivocado. De modo contrario, sería una muestra total de cobardía y una falta de intelectualidad al no tener un argumento válido. Que todo sea por la búsqueda de la verdad y la edificación de la iglesia. Me envian entonces un correo por yahoo o a [email protected] haber quien tiene la razón
Hola,
Persignar:
Es un sacramental instituido por la Iglesia en el numeral 1668 del Catecismo, como símbolo de recuerdo de la cruz en la que Jesús murió por nuestra salvación y signo de redención y de bendición.
Se persigna al inicio de la Santa Misa y al final con la bendición del celebrante. También en el inicio de oraciones.
No dice textualmente “persignar” en la Biblia, pero se deduce y se hace en recuerdo de lo dicho por Jesús en:
Mateo 24, 30 Entonces aparecerá en el cielo la señal (CRUZ) del Hijo del hombre. Todas las razas de la tierra se golpearán el pecho y verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo, lleno de poder y de gloria.
“Con este signo (cruz) vencerás” dijo el Ángel del Señor a Constantino
Y también antes de hacer algo, como un signo para incrementar la autoestima y tener éxito en el objetivo.
(Haciendo una cruz la primera en la frente, para librarnos de los malos pensamientos y diciendo)
+Por la señal de la Santa Cruz,
(otra cruz en la boca, para librarnos de las malas palabras y diciendo)
+de nuestros enemigos
(otra cruz en el pecho, para librarnos de las malas obras y diciendo)
+líbranos Señor Dios nuestro
(y santiguarse diciendo)
+En el nombre del Padre (en la frente) y del Hijo (en el vientre) y del Espíritu (en el hombro izquierdo) Santo (en el hombro derecho). Amén.
Algunas personas nos santiguamos al pasar frente a una Iglesia Católica como un saludo de respeto a Dios y también antes de hacer algo, como un signo para incrementar la autoestima y tener éxito en el objetivo.
Saludos
.
Está en el mismo capítulo y versículo donde dice que la Palabra de Dios es sólo y nada más que lo que está escrito en la Biblia....justo al lado también donde dice que hay que hay que creer sólo y nada más que lo que dice la Biblia escrita....
Saludos
Damián
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Tampoco dice nada de:
Teclado, mouse ,pantalla, computadora, internet... y tu lo estás usando... y no creo que lo hagas para el mal.
Por tanto, no demuestra nada tu pregunta...
Saludos
Servido Sr. Pastor............. que mas quiere?
Las bendiciones sobre cosas y personas se suelen expresar con la señal de la cruz. Cuando el sacerdote bendice al pueblo o a algún objeto hace la señal de la cruz, una vez, con su mano derecha, sobre la persona u objeto a bendecir.
Porque no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el Evangelio. Y no con palabras sabias, para no desvirtuar la cruz de Cristo. Pues la predicación de la cruz es una necedad para los que se pierden; mas para los que se salvan -para nosotros- es fuerza de Dios. Porque dice la Escritura: Destruiré la sabiduría de los sabios, e inutilizaré la inteligencia de los inteligentes. ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde el docto? ¿Dónde el sofista de este mundo? ¿Acaso no ha convertido Dios en necedad la sabiduría del mundo? De hecho, como el mundo mediante su propia sabiduría no conoció a Dios en su divina sabiduría, quiso Dios salvar a los creyentes mediante la necedad de la predicación. Así, mientras los judíos piden señales y los griegos buscan sabiduría, nosotros predicamos a un Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad para los gentiles; mas para los llamados, lo mismo judíos que griegos, un Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios. Porque la necedad divina es más sabia que la sabiduría de los hombres, y la debilidad divina, más fuerte que la fuerza de los hombres (I Corintios 1, 17-25).
Es lógico comenzar esta serie de doce cartas sobre la oración cristiana de la misma forma con la que iniciamos toda oración: con la señal de la cruz. Comenzamos a rezar “en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén”. Invocamos a la Santísima Trinidad e iniciamos nuestra oración en su nombre. Recordamos así el centro de nuestra fe recibida en el Bautismo (Mateo 28, 19). Al hacer un ofrecimiento de obras al inicio del día para dar un sentido sobrenatural a todas nuestras actividades; al empezar un examen de conciencia que, más que simple contabilidad moral, es un acto de diálogo con Dios, Padre de misericordia; en el inicio del rezo del Angelus; en las primeras palabras de la Misa: siempre está presente la señal de la cruz y la invocación a Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, de quien procede toda bondad y a cuyo santo nombre nos confiamos.
Rezamos en nombre de Dios y este “nombre” encierra en sí toda la misteriosa realidad de “Aquel que es el que es” (Éxodo 3, 13-15) y no necesita de nada ni nadie. El Catecismo de la Iglesia Católica explica muy bien la profundidad que encierra el nombre de Dios: A su pueblo Israel, Dios se reveló dándole a conocer su Nombre. El nombre expresa la esencia, la identidad de la persona y el sentido de su vida. Dios tiene un nombre. No es una fuerza anónima. Comunicar su nombre es darse a conocer a los otros. Es, en cierta manera, comunicarse a sí mismo haciéndose accesible, capaz de ser más íntimamente conocido y de ser invocado personalmente... Al revelar su nombre misterioso de YHWH, "Yo soy el que es" o "Yo soy el que soy" o también "Yo soy el que Yo soy", Dios dice quién es y con qué nombre se le debe llamar. Este Nombre Divino es misterioso como Dios es Misterio. Es, a la vez, un Nombre revelado y como la resistencia a tomar un nombre propio, y por esto mismo expresa mejor a Dios como lo que Él es, infinitamente por encima de todo lo que podemos comprender o decir: es el "Dios escondido" (Isaías 45, 15), su nombre es inefable (Cf Jueces 13, 18), y es el Dios que se acerca a los hombres. Al revelar su nombre, Dios revela, al mismo tiempo, su fidelidad que es de siempre y para siempre, valedera para el pasado ("Yo soy el Dios de tus padres", Éxodo 3, 6) como para el porvenir ("Yo estaré contigo", Éxodo 3, 12). Dios, que revela su nombre como "Yo soy", se revela como el Dios que está siempre allí, presente junto a su pueblo para salvarlo (Catecismo de la Iglesia Católica 203 y 206-207).
Saludos.
NO, ¿Y?
Tampoco habla de masturbarse la mente. Y tú te masturbas tratando de matar a Dios.
Fraternal abrazo
Bueno no toda lo contiene la biblia por el nombre, que le dan las religiones cristianas a sus signos, símbolos y ritos, los cuales son las formas de expresar la fe ante Dios y los mismos hombres; El santiguarse es propio del catolicismo y es la aplicación de los nombres de la santísima trinidad en forma de cruz, en la cual murió nuestro Señor. Es lo mismo que los términos Biblia y Trinidad. Hay que tener cuidado con caer en el biblicismo. Dios te bendiga.
No, como tampoco viene que uses computadoras, ni tampoco viene América para que ahí vivas.
Ve entonces a ordeñar una cabra en Arabia, que eso sí que viene, y deja de contaminarte con cacharros mundanos como este ordenador. Vende lo que tienes y dalo a los pobres.
no, las personas se dejan engañar facilmente porque no leen.
No. Es una más de las pendejädas de los católicos.